La belleza trasciende la estética

lunes, 9 de noviembre de 2015

Una barra de pan recién cocida





San Hugo en el refectorio de los cartujos (detalle). Francisco de Zurbarán


Entre tanto desorden de matices,
óleos mediocres de la escuela de El Greco,
bargueños, platos, libros, vasijas, pergaminos,
y un frío de gusanos como el que vive dentro de un panteón
junto al joven portero que esperaba impaciente
a que fueran las dos para cerrar la sala,
una barra de pan recién cocida
se enfriaba tierna de claridad
como si Zurbarán acabara de entrar al refectorio
y fuera a bendecir a la Pintura.


Hilario Barrero




8 comentarios:

CHARO dijo...

Me quedo con el apetitoso pan y ni caso a los frios gusanos.Besicos

TORO SALVAJE dijo...

Incluso se huele.

Besos.

Rosa dijo...

Haces muy bien, Charo, jajaja ...

¡Un beso!

Rosa dijo...

Ummmmm, y huele de maravilla ...

Un beso, Toro.

Gelu dijo...

Buenas noches, Rosa:

Me pregunto si en el cuadro, Zurbarán habría representado a San Bruno
en ese cartujo del detalle que has seleccionado.
Me queda la duda de que pueda ser el monje que está al lado con la cabeza descubierta.
El pan y las chuletitas en el plato, una auténtica tentación. Curiosa la jarra, decorada en azul, con el escudo heráldico del obispo.

Abrazos

Rosa dijo...


Sí, es san Bruno, te dejo el análisis.

Era el día de Jueves Santo.

La jarra pertenece a las famosas cerámicas blancas y azules de Talavera, con el escudo del Obispo y la Orden. Las naturalezas muertas, ordenadas en un friso, y paralelo al que forman los monjes, acentúan el mensaje, tan bien expresado, del ayuno y penitencia cartujos.
Abstinencia y ayuno, contemplación y oración, son las virtudes que deben acompañar al cartujo.
Y, sobre todo, el amor a la Virgen, de quien los cartujos recibieron la devoción al Santo Rosario.

Un beso, Gelu :))
Gracias, por dejar los enlaces.


AMALIA dijo...

Qué pan tan exquisito!!.

Un beso grande.

Rosa dijo...

Sí, Zurbarán es magnífico.

Un beso grande para ti también, querida Amalia.