Nuestras abuelas y madres no han superado en la cocina, al menos lo digo por mi.Besicos
Y que verdad es. Recuerdo aún ese aroma peculiar de su casa, de su cocina... sí. Totalmente sigue encendida.Besos
Siempre serán nuestras maestras.Un beso, Charo.
Totalmente, sí Maite.Un beso.
Nuestras abuelas y madres no han superado en la cocina, al menos lo digo por mi.Besicos
ResponderEliminarY que verdad es. Recuerdo aún ese aroma peculiar de su casa, de su cocina... sí. Totalmente sigue encendida.
ResponderEliminarBesos
Siempre serán nuestras maestras.
ResponderEliminarUn beso, Charo.
Totalmente, sí Maite.
ResponderEliminarUn beso.